La Misión es una acción extraordinaria de evangelización, durante la cual la comunidad cristiana, con la colaboración de los misioneros:
- Suscita y renueva el encuentro personal con Jesucristo (cf. EG 3).
- Revitaliza y fortalece la experiencia de fe.
- Crece en comunión, fraternidad y corresponsabilidad.
- Potencia la “salida misionera”.
- Enriquece su proyecto pastoral.
Es un proceso que se realiza en tres etapas: premisión, misión y postmisión. En ellas se ponen en juego diversos medios y acciones:
- Un itinerario formativo-espiritual para las personas y grupos vinculados a la parroquia y aquellos que deseen integrarse para fortalecer su identidad cristiana y su compromiso evangelizador.
- Las visitas misioneras a todos los hogares de la feligresía.
- Las asambleas familiares cristianas, formadas por grupos de vecinos que se reúnen para compartir la vida y la fe iluminados por la Palabra de Dios.
- La Escuela de Oración, que ofrece espacios y medios para el encuentro personal con el Señor y para aprender a orar.
- Las celebraciones misioneras y eucaristías, con dinamismo evangelizador y creadoras de comunidad, que suscitan y educan la fe.
- Los encuentros sectoriales con niños, adolescentes, jóvenes, matrimonios y parejas, personas mayores…, que pretenden facilitar el encuentro con Jesucristo y la integración en la comunidad parroquial.
- La visitas a los enfermos e impedidos para acompañar e iluminar desde la fe su situación.
- La acogida individual para la escucha y la celebración del sacramento de la reconciliación.
- La potenciación o creación de los grupos de acción pastoral de la parroquia: Cáritas, Pastoral de la Salud, catequistas, equipo de liturgia, equipos de matrimonios, pastoral juvenil, continuidad de las asambleas familiares cristianas…
Díptico de presentación de la Misión | Vídeo resumen de la Misión |