Mateo 3, 1-12:
Domingo, 4 de diciembre 2022 (2º T A A)
“Por aquellos días, Juan el Bautista se presentó en el desierto de Judea predicando: convertíos, porque está cerca el reino de los cielos… Yo os bautizo con agua para que os convirtáis, pero el que viene detrás de mí… os bautizará con Espíritu Santo y fuego”.
No creo equivocarme mucho si afirmo que en muchos de nosotros hay algunas actitudes un poco hipócritas. Nos resulta más fácil hablar, aconsejar, señalar, pero es más complicado que nosotros mismos llevemos a la práctica cosas que pedimos a los demás. Y puede que hasta nos justifiquemos.
Al adentrarnos en el Adviento escuchamos la voz de Juan el Bautista que nos llama a la conversión, sobre todo de esas actitudes (cada uno conoce bien las suyas si es sincero consigo mismo). Y nos anuncia la venida del que nos bautizará con Espíritu Santo y fuego. Con su ayuda haremos que la llegada del Reino de Dios esté más cerca. Reino anunciado por los profetas como una situación de vida en la que la justicia y la paz, el perdón y la fraternidad serán las señales.
Que, con la sinceridad de nuestro corazón, el compromiso de nuestra vida y con la esperanza puesta en el que viene a mostrarnos el camino, pasemos, siguiendo las palabras del Bautista, de “ser paja para el fuego, a trigo para el granero”.
Juan Ramón Gómez Pascual, cmf
¿Cómo anuncias tú la llegada del Reino de Dios?