SÁBADO 17 DE SEPTIEMBRE DE 2022
Lucas 8, 4-15:
«Salió el sembrador a sembrar su semilla. Al sembrarla, algo cayó al borde del camino… Otra parte cayó en terreno pedregoso… Otra parte cayó entre abrojos… Y otra parte cayó en tierra buena, y, después de brotar, dio fruto al ciento por uno. Dicho esto, exclamó el que tenga oídos para oír que oiga».
Diariamente sale el Señor a sembrar en el campo de nuestros corazones.
Y, diariamente también, conviene pensar en qué tipo de tierra cae su semilla.
Hoy es un buen día para que examines el tipo de tierra que tiene tu corazón:
– Si eres tierra pisada y endurecida,
– Si las piedras abundan excesivamente en ella,
– Si en ella crecen de tal manera las malas hierbas que ahogan todo lo que en ella brote
– O si es, finalmente, tierra buena y abonada en donde brota, crece y fructifica toda aquella semilla que en ella se deposite.
El trozo de este Evangelio termina diciendo: «el que tenga oídos para oír que oiga».
Pide al Señor los oídos y las fuerzas para oír, escuchar, acoger y llevar a la práctica su Palabra.
Buenos días.
Antonio Sanjuan Cmf