LUNES 6 DE SEPTIEMBRE DE 2021
Lucas 6, 6-11:
«Jesús dijo al hombre: «extiende el brazo». Él lo hizo y su brazo quedó restablecido».
A Jesús lo encontramos siempre haciendo el bien, rehabilitando siempre a la persona humana, que para Él es lo más importante.
La dignidad de la persona está por encima de todo, incluso por encima de cualquier norma porque toda norma ha de estar encaminada al bien del ser humano.
Hoy lo vemos curando en sábado, día en el que estaba totalmente prohibido realizar cualquier tipo de actividad.
De nuevo es la fuerza de su Palabra la que obra el prodigio.
Todos tenemos necesidad de restablecer alguna parte de nuestra vida que puede estar un poco o un mucho paralizada.
Ponte en la presencia de Jesús.
Repasa durante unos minutos tu vida. Y cae en la cuenta de aquellos aspectos que pueden estar un poco paralizados. Corremos el peligro de descuidarnos y paralizarnos en nuestra vida de fe.
Y deja que Jesús con su Palabra poderosa cure tus «parálisis».
Buenos días.
Antonio Sanjuán Marín, cmf