MARTES 29 DE OCTUBRE
Lucas 13, 18-21:
«El Reino de Dios se parece a un grano de mostaza… se parece a la levadura que una mujer toma y mete en tres medidas de harina hasta que todo fermenta».
Volvemos a las cosas pequeñas. A las semillas diminutas de mostaza y a la pequeña levadura en medio de la masa.
A lo que apenas se ve pero que se siente y se nota cuando falta.
Son los pequeños detalles, son los pequeños servicios, las sonrisas regaladas, los abrazos que de verdad expresan cariño, una palabra de aliento, de bendición y de consuelo…
Estas cosas pequeñas son las que construyen el Reino de Dios, porque son como ese poquitín de levadura que hace fermentar a toda la masa.
Es también como ese pequeño ladrillo que es insignificante en la construcción de una torre gigantesca, pero que es esencial para la misma construcción.
Pide al Señor que seas ese granito de mostaza o ese poco de levadura allí donde estés, para que por medio de ti crezca y se extienda el Reino de Dios.
Buenos días.
Antonio María Sanjuán Marín, cmf