VIERNES 31 ENERO
Marcos 4, 26-34:
«¿Con qué podemos comparar el Reino de Dios? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero, después de sembrada, crece, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros del cielo pueden anidar a su sombra».
A Jesús le gustan las cosas sencillas, humildes y pequeñas, porque en lo pequeño y en lo débil se muestra la grandeza y la fuerza de Dios.
Dice que el Reino de Dios se parece a un granito de mostaza. Algo tan pequeño crece y da fruto y vida.
Plantea tu vida desde lo pequeño. Así, llegarás a ser grande en el Reino de los Cielos.
La santidad del Evangelio no consiste en hacer heroicidades. Un verdadero héroe es aquella persona que mantiene su fidelidad en «la calderilla del día a día».
Confía en la fuerza de la Palabra y en el poder del Espíritu Santo. Déjate llevar por Él y verás cómo la gracia de Dios germina en ti, va creciendo y produce abundante cosecha.
Buenos días.
Antonio María Sanjuán Marín, cmf