SÁBADO 18 DE JULIO
Mateo 12, 14-21:
«No porfiará, no gritará, no voceará por las calles, la caña cascada no la quebrará, el pábilo vacilante no lo apagará».
Sigue hoy el contraste entre la legalidad fría de los fariseos y la misericordia entrañable de Jesús, que sigue curando, sigue sirviendo, sigue perdonando, y sigue socorriendo con profunda piedad.
Y lo hace sin estrépito y sin grandes apariencias. Lo hace desde la sencillez, desde la humildad, casi desde el anonimato.
Sin porfiar, sin gritar, sin vociferar, sin terminar de romper la caña cascada y sin terminar de apagar el pábilo vacilante.
Aprende hoy de Jesús. Practica así la misericordia. Verás qué feliz te sientes.
Buenos días.
Antonio María Sanjuán Marín, cmf