MIÉRCOLES 4 DE DICIEMBRE
Mateo 15, 29-37:
«Jesús subió al monte y se sentó en él. Acudió a Él mucha gente llevando tullidos, ciegos, lisiados, sordomudos y muchos otros; los echaban a sus pies y Él los curaba…Tomó los siete panes y los dos peces, dijo la acción de gracias, los partió y los fue dando a los discípulos, y los discípulos a la gente».
El monte es considerado en la Biblia como lugar de encuentro con Dios.
Hoy leemos en el evangelio que Jesús sube al monte y se sienta en él.
Y en ese monte, Jesús se encuentra con la gente y se acerca a las personas de dos maneras:
1: CURANDO: a Jesús acuden tullidos, ciegos, lisiados, sordomudos y muchos otros. Y todo aquel que se encuentra con Él queda curado.
2: ALIMENTANDO: partió los panes, los fue dando a los discípulos, y los discípulos a la gente. Y comieron todos hasta saciarse.
Busca también tú durante este tiempo de Adviento encontrarte más fuertemente con Jesús:
1: SUBE al monte de la oración y del sacramento del perdón (confesión). Presenta a Jesús tus enfermedades, tus sorderas, tus cegueras… Échate a sus pies. Él te curará. Te sentirás acogido, querido y perdonado.
2: SUBE también al monte de la eucaristía. Sáciate de la vida de Jesús. Únete a Él en el pan que es su cuerpo. Quedarás saciado de vida eterna.
3: COMPÁRTETE con los demás: tu tiempo, tus bienes, tu alegría…
Buenos días.
Antonio María Sanjuán Marín, cmf