SÁBADO 30 DE NOVIEMBRE
Mateo 4, 18-22:
«Venid y seguidme, y os haré pescadores de hombres. Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron».
La predicación de Jesús en los evangelios comienza con una invitación al seguimiento y a la conversión.
A cambiar de mentalidad y de vida siguiéndole a Él.
Jesús nos invita a empaparnos de Evangelio, porque en la medida en que el Evangelio sea nuestra norma de vida, esta vida nuestra cambiará.
Como cambió la vida de estos primeros seguidores de Jesús: de pescadores de peces pasaron a ser pescadores de hombres.
¡Cuántas personas se debaten entre las olas de la duda, de la increencia, de la indiferencia, del pasotismo…!
¡Cuantas personas son náufragos en mares de pobreza, de miseria, de incultura…!
¡A pescar en esos mares juntamente con Jesús!
A esto nos invita hoy el Señor: «Venid y seguidme, y os haré pescadores de hombres».
Nos invita a vigilar y a socorrer a tantos hombres y mujeres que necesitan de un «salvavidas».
Deja que Jesús te haga pescador de hombres y te envíe a los mares revueltos del mundo.
Pide hoy fortaleza al Señor para dejar tus redes, para dejar todo aquello que te impide seguirle a Él, dejando que tu vida cada día sea más transparencia de Evangelio y dé sentido a otras vidas que son víctimas de tantos y tantos «naufragios».
Buenos días.
Antonio María Sanjuán Marín, cmf