JUEVES 17 DE SEPTIEMBRE
Lucas 7, 36-50:
«Sus muchos pecados están perdonados porque tiene mucho amor».
Aparecen en este evangelio dos personajes prototipos:
Un fariseo de conducta intachable y una mujer de conducta muy reprobable.
■ El fariseo, que está por encima de todo, que se lo sabe todo y que se convierte en juez de todo y de todos.
Es una persona llena de leyes, de normas y de juicios, pero vacía de amor y de cercanía.
■ Una mujer, que está a los pies de Jesús, que llora, que cubre de besos esos pies, que los baña con lágrimas y que los unge con perfume.
Es una persona vacía de sí misma y llena de amor.
Y es la persona por la que Jesús toma partido.
Es la persona que se abre a la misericordia y al perdón de Jesús.
Busca hoy un rato y ponte a los pies de Jesús para que Él te vacíe de todo rasgo fariseo y te llene de su infinita misericordia, de su infinito amor y de su infinito perdón.
Disfruta del día que Dios te regala.
Buenos días.
Antonio María Sanjuán Marín, cmf